Allá que voy

Hacer deporte. Moverse. Al menos una hora al día, todos los días del año.

Esa es parte de la “receta” para preparar al cuerpo para tareas importantes, y afrontar un porvenir.

Y se me olvidaba el humor.

Estoy decidido a ello. Llevo varias semanas dándole vueltas a la cabeza al asunto.

Y ahora me he decidido a llevarlo a la práctica.

Mañana es el día. Y puedo hacerlo. Me encanta andar.

El único problema es que me aburre todos los días el mismo camino. Tengo varias alternativas.

Ir hasta los dos pueblos más cercanos, o caminar hacia un “oasis”, al que mucha gente va a andar, correr, bicicleta...

Es requisito indispensable para alcanzar los sueños.

Sí, para obtener algo tenemos que dar algo a cambio. En este caso, como en muchos, el dinero no hace falta, solo la voluntad que dice “adelante”.

Otra cosa. El sobrepeso.

Mi psiquiatra dice que comente al endocrino que contemple la opción de cirugía para quitarme los quilos de más.

No sé si lo ha dicho para asustarme, pero lo ha conseguido, estoy acojonado. 

Espero perder peso antes de que me toque pasar por ahí.

Además yo no me veo tan gordo como esos que salen en la televisión.

Con todo lo que pienso hacer, comer la mitad, andar, etc... espero que sea suficiente.

Vibrar, sentir, con el Universo.