Estaba grabando de Youtube a MP3, un programa de radio.
Acuden gente de renombre en diversos campos y les hacen una entrevista. También ponen citas o frases celebres.
Es variado y muy ameno. Agradable de oír y se aprende.
Bueno pues estaba en eso cuando suena el Whatsapp, un mensaje de mi hermano pequeño.
En el cual este programa de radio daba en Septiembre unas conferencias gratuitas si cogías filas más atrasadas.
En seguida me he apuntado a una de ellas, hay varias conferencias durante varios días.
Es en Madrid, y yo ardo en deseos en que llegue el día.
La conferencia se puede ver en Youtube pero prefiero que sea sorpresa.
Me he alegrado mucho en como ha respondido el Universo a mis ansias de aprender, y también a mi hermano le doy las gracias. El no sabía que estaba bajando vídeos precisamente de ahí.
Bueno otro asunto.
Yo no sé por qué empecé esto de escribir Un diario, como decía Steve Jobs, con el tiempo mirando hacia tras comprendemos como se fueron uniendo los puntos y llegamos a este presente.
Ni tampoco por qué continuo escribiendo.
Dice Richard Bach que cuando una cosa tiene que salir de la oscuridad a la luz, si uno no lo hace se le asigna en un susurro la tarea a otra persona.
Y vengo a decir todo esto porque me he obsesionado con el contador de visitas. Y cada vez va peor.
Ya sea que la gente no se lleva de vacaciones el ordenador detrás, o lo que sea, pero las anotaciones en el diario solo las lee una persona.
Por cierto a ese uno tan fiel, una sonrisa, y gracias por estar ahí, aunque yo no lo entienda.
Vibrar, sentir, con el Universo.
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