lunes, 3 de julio de 2017

El reloj y el calendario

Como dice el libro del Secreto el Universo es igual a una compra por Internet.

Lo has pedido, lo has pagado, y sabes que llegará, estas convencido de ello.

Al igual ocurre con lo que pedimos al Universo.

Tenemos que tener esa fe, esa esperanza, y sobretodo esa certeza.

Mis visualizaciones con el coche que quiero son cada día más claras.

Así que supongo que es lo próximo que recibiré.

Para mi mente un casa, un hogar, es más difícil que ocurra.

Entonces estoy retrasando lo que el Universo me podía dar mañana mismo.

Hablando sobre el amor, procuro evitar encontrarme con la dependienta de mi calle.

He cambiado horarios de bajar al parque, y he ido más lejos para no comprar en su tienda.

No estoy enojado, enfadado, debo ser sincero, lastimado sí.

Ayer fue un día duro de llevar en ese sentido. Y hoy también.

Yo quería por lo menos ser amigos, tal vez me pasé con el tipo de regalo, o fui muy directo.

La enseñanza que he sacado es que he amado, cosa imposible hace unos meses.

Desde que no tengo voces, me quiero mucho, mucho.

Y está claro que ese suplemento me hizo avanzar hacia ella.

Mientras va hacia delante el calendario, y el reloj marca horas y minutos, hacia mis sueños.

Vibrar, sentir, con el Universo.

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