sábado, 20 de mayo de 2017

Toda la carne en el asador

Como ya escribí ayer toda mi conexión con el  Universo ha quedado en una única señal, conseguir esa cámara de fotos.

Los otros deseos sigo en ello, pero no los pido ahora con tanta intensidad.

De salud, mi Yo delgado, está cada vez más cerca. He sentido hambre y me siento mejor.

No sé si podré publicar hoy, puesto que el Diario no funciona correctamente, espero que se solucione pronto.

Como ya se sabe, si algo no viene, es que viene algo mejor.

Ya he elegido mi próximo destino. Requena.

He reservado hotel entre semana. No me gusta hacer fotos en el bullicio. Prefiero la tranquilidad de un día normal de trabajo.

Desde luego el sitio promete, y mucho. He estado viendo fotografías del lugar y me encanta.

Estaba entre Utiel o Requena, al final ha sido el último el que ha salido vencedor.

El lunes tengo prueba en el médico, espero que salga todo correcto. Hasta ahora sólo han encontrado grasa en el hígado. 

Y por último sigo buscando música que toque la fibra sensible, y me haga vibrar con más fuerza con el Universo.

Estoy entre los cantos gregorianos, y la música relajante, aunque no descarto canciones pegadizas.

Vibrar, sentir, con el Universo.


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